Primeras iglesias de Vallecas (II): La ermita de la Virgen del Carmen y otros lugares de culto

PRIMEROS AÑOS

“Según dice un periódico, en el barrio de Nueva Numancia, antes Puente de Vallecas, en el terreno cedido por D. Francisco la Presilla, se ha dado principio á la construcción de una capilla donde los fieles podrán cumplir con los preceptos religiosos” (La Esperanza, 5-2-1868.).

La noticia se publica en febrero de 1868 y es el primer documento de la existencia de un lugar sagrado en el Puente de Vallecas. Aunque no podemos asegurar en qué año quedó construida, la ermita se inauguró en 1880, bajo la advocación de la Virgen del Carmen, como veremos más tarde, y ello facilitó la asistencia a misa a los primeros vecinos de Nueva Numancia y aledaños.

[Anteriormente, la iglesia más cercana era Nuestra Señora de Atocha, erigida en Basílica por el papa Pío IX en 1863, año en que se restableció el culto del santuario después de unos tres decenios de abandono. Un cuarto de siglo después, la reina Mª Cristina ordenó su derribo por peligro de hundimiento y la ermita del Carmen se convierte en el único lugar donde los vecinos del Puente pueden cumplir el precepto dominical. La capilla más próxima es ahora N.ª S.ª de las Angustias, en Delicias, que comienza a construirse en 1889.
La Virgen de Atocha, que recibía culto en una pequeña capilla provisional, fue trasladada a la iglesia del Buen Suceso que, como la Basílica de Atocha, pertenecía al Patrimonio Real. No será hasta 1924 cuando los dominicos solicitarían al rey Alfonso XIII concediese facilidades para restaurar el convento e iglesia de la Virgen de Atocha.]

Nueva Numancia era un distrito del pueblo de Vallecas —a cinco kilómetros de la barriada— y pertenecía a la parroquia de San Pedro ad Vincula. En el año 1885 se hace una visita canónica a la Parroquia por el Arzobispo de Toledo, a la que entonces pertenecía Vallecas… Se hace una descripción métrica del edificio parroquial y de sus ermitas correspondientes. Y entre ellas se menciona la Capilla de la Virgen del Carmen:

"En el barrio del Puente: en el centro de una manzana de casas cedió para una Capilla Pública una sala su dueño D. Pedro Bosch, vecino de Madrid, hizo la obra a su cuenta y la proveyó de cosas necesarias para la celebración de la Santa Misa, único acto religioso que se hace en ella, por medio de un Presbítero residente en dicho barrio y a quien tiene entregada la llave el Fundador (con permiso del Prelado). Su largo es de 5 metros, sus tapias sencillos tabiques que la separan de las casas-tabernas que están unidas a ella”.
[Pedro Bosch y Llanas estaba casado con Josefina, hija de Francisco de la Presilla Ortiz de Taranco. Don Francisco fallece en 1870 y su esposa, Antonia Calás Marcos, en 1876. La otra hija del matrimonio era Ramona, casada con Isidro Villlota y Dupret.]

Más precisa es la información de la actual Hermandad de Ntra. Sra. la Virgen del Carmen, según la cual la ermita se bendice el día 3 de Julio de 1880: ese día “Don Felipe García y Rodríguez bendice la capilla en presencia de Don Benito Martín y Don Pedro González y Barrer; este último, sería el Capellán de la misma hasta 1907”. A dicho capellán se le cita en algunos medios y en años posteriores, con otro segundo apellido: “D. Pedro González Romera”¹ oficia una misa solemne en la capilla el 16 de julio de 1882, “pronunciando el panegírico de la Virgen el distinguido orador sagrado Dr. Benítez y Peláez”².

[¹Diario Oficial de Avisos de Madrid, 15-7-1882. En La Iberia, 14-7-1983 y El Globo, 15-7-1984 se escribe Barrera en lugar de Romera. ²Diario Oficial de Avisos de Madrid, 15-7-1882.]

Y en 1888 se escribe:

“En la linda capilla que los Sres. de Bosch poseen en el barrio de la Nueva Numancia (Puente de Vallecas), se verificó anteayer la función religiosa de primera Comunión de los niños y niñas de las escuelas públicas, cantando estos durante la misa y la procesión, que por la tarde recorrió las principales calles, bonitas estrofas alusivas al acto. El alcalde del barrio Sr. Domínguez [Pablo]³, y el cura párroco de Vallecas, Sr. Parejo, recibieron muchas felicitaciones”⁴.
[³El alcalde de Vallecas era por entonces Manuel Vélez (de 1881 a 1894). ⁴El Liberal, lunes 14 de mayo de 1888.]

Como ya se ha dicho, la parroquia de Vallecas era San Pedro Ad Víncula y, a partir de 1891, el Puente de Vallecas pasa a la jurisdicción parroquial de Nuestra Señora de las Angustias, en Delicias. Hasta 1910, año que se erigió la parroquia de San Ramón Nonato.

[La parroquia de Nuestra Señora de las Angustias existía desde 1878, aunque su sede era la Basílica de Atocha. En 1887 dejó de ser Parroquia de Palacio y pasó a depender de la jurisdicción ordinaria. En 1889 se comenzó a construir una modesta capilla entre las calles de Murcia y de Delicias, nueva sede de la Parroquia de Nuestra Señora de las Angustias. La iglesia actual se comenzó a construir en este mismo lugar en 1924 (actual calle de Rafael de Riego, 16).]

Iglesia de la N.ª S.ª de las Angustias (117) en el mapa de Facundo Cañada (1900) y en una imagen de 1899   

BAJO LA ADVOCACIÓN DE LA VIRGEN DEL CARMEN, PATRONA DE NUEVA NUMANCIA
Aunque no podamos precisar el año exacto que finaliza la construcción de la capilla, es en julio de 1880 cuando tenemos la primera noticia de Ntra. Sra. del Carmen como “patrona del barrio de Numancia” y de la misma existencia de ese lugar sagrado:

“Con motivo de ser el santo de su patrona, Nuestra Señora del Carmen, los vecinos de Numancia, situado en las inmediaciones del puente de Vallecas, celebrarán hoy fiestas solemnes, que á no dudar, estarán muy animadas.
Además de la procesión que se verificará esta tarde, para la que han construido diferentes arcos desde el puente hasta la capilla en que se venera a la Virgen, habrá por la noche iluminación, baile campestre y fuegos artificiales.
Ayer, desde las seis de la tarde, varias músicas recorrieron el barrio, y hubo también bailes campestres.” (El Liberal, 16-7-1880).

Los años sucesivos se sigue dando información (El Globo, 15-7-1881; Diario Oficial de Avisos, 15-7-1882; La Iberia, 14-7-1883) de los festejos de la Virgen del Carmen, “patrona del Puente de Vallecas” (1881) o “patrona de la Nueva Numancia” (1882 y 1883), y de la “misa solemne con sermón” que se celebra el día de su fiesta.
La “calle de la Presilla, en donde está la capilla” se cita, por primera vez, en 1881. Y cinco años más tarde se informa que “Mañana 16, día de la titular y patrona del barrio, se cantará á las siete y media de la mañana misa solemne que oficiará el cura de Vallecas D. Ramón Laredo, en la capilla del pueblo, propiedad de doña Josefina de la Presilla” (El Liberal, 15-7-1886.).
En 1892, igual que otros años, se canta “una gran Salve á toda orquesta en la tienda de campaña que se ha construido frente á la capilla, que fundaron, y es propiedad, de doña Josefina de la Presilla y su hija María Bosch.” (El Heraldo de Madrid, 14-7-1892).

[María era la hija mayor del matrimonio de Pedro Bosch y Llanás y Josefina de la Presilla Calás; después vinieron Pedro y Carmen, que nació en 1887 y fue bautizada con el nombre de la Patrona de Vallecas. A Carmen la siguieron Francisco, M.ª de la O, Luis, Esteban y Milagros.]

En 1893, de la capilla de N.ª S.ª del Carmen, “propiedad de Dª Josefina de la Presilla, que dicha señora y su hija María fundaron hace 13 años” (La Correspondencia de España, 16-7-1893), salieron en procesión “las imágenes de la Virgen, San José, San Antonio y San Luis, recorriendo las calles del barrio”. La misa solemne y los actos centrales de la fiesta tenían lugar en “una grandiosa tienda de campaña que se ha construido frente a la capilla”.
Ese mismo año el Heraldo de Madrid (16-7-1893) informa de la conmemoración de la festividad de la Virgen del Carmen:

“Todo júbilo es hoy... el Puente de Vallecas. Las siete u ocho mil almas del barrio conmemoran con tres días de feria y de jolgorio la festividad de la Virgen del Carmen.

El teniente cura de las Angustias de Madrid, cura en el Puente de Vallecas de la filial de aquella, y el alcalde del barrio, han sido los organizadores de la fiesta, [pues] el Puente, por lo religioso pertenece a la capital hace dos años, y por lo civil al Municipio de Vallecas […].
Por eso el sacerdote D. Cipriano González andaba ayer atareadísimo, con el sombrero de teja echado para atrás o bajo el brazo y remangada la sotana, adoptando medidas, dando órdenes, cuidando de que todo estuviese bien dispuesto [...].
Según nos dijo, la capilla del barrio Nueva Numancia, vulgo del Puente, solemnizara a la perfección la fiesta. Hoy a las doce misa solemne, cantada, acompañada por una buena orquesta.
Por la tarde, procesión; saldrán seis imágenes: la Virgen del Carmen, Santa Teresa, San Luis Gonzaga, San José y el Niño Jesús.
La Virgen y San Luis, que hemos visto son dos buenas esculturas. Después habrá rezos, y se comenzara una novena en honor de la Madre de Dios […].
Por todas las calles del barrio se han colocado innumerables puestos; ante muchos establecimientos de la calle del Pacifico se han hecho especie de enverjados de madera, también con toldos; estos serán bailes privados para reunión de amigos.
Loa aficionados al matuteo menudo estarán contentos ante la probabilidad de entrar por fraude las carnes, el vino y las frutas; que estas, sobre todo, son superiores a las del mejor mercado de Madrid […].
Sobre todo, hoy, el día principal de los festejos oficiales—que por conocerse no queremos repetir— será digno de que la gente vaya. Toros, corridas de burros, iluminaciones, fuegos, á granel y medias tintas á discreción”.

En otro periódico se dice que “el número de romeros no bajaría de quince mil” (El Liberal, 19-7-1893). Y en 1890 se explicaba la procedencia de algunos de los asistentes a la verbena del Carmen, y no sabemos si también romeros de la Virgen: el “Puente de Vallecas, ó lo que es lo mismo, el barrio de Nueva Numancia, se vió favorecido por lo más selecto de los barrios del Avemaría, Lavapiés, Vistillas, Embajadores, Humilladero, Toledo y Curtidores”. Ese año, igual que los dos anteriores, salió también en procesión Nuestra Señora del Rosario (La Iberia, 16-7-1890).

Por una información fechada el 20 de julio de 1895 y publicada en El Liberal, sabemos que las fiestas en honor de la Virgen del Carmen se celebraban desde hacía “quince años”, desde 1880 por tanto, año de la inauguración de la ermita; que la “concurrencia” era “numerosísima” −más de “diez mil almas” −; y que el “barrio del Puente de Vallecas” era “uno de los alrededores [de la villa y corte] mejores y más frecuentados por la gente de buen humor”.

“Conforme habíamos anunciado, anteayer terminaron los tres días de grandes festejos que á la Virgen del Carmen dedican hace quince años los propietarios y vecinos de la Nueva Numancia (Puente de Vallecas), patrona de dicho populoso barrio, habiendo presenciado la misa de campaña, el sermón, la magnífica y grandiosa procesión y los dos días de fuegos artificiales, etc., etcétera, y cuantos festejos se han hecho, una concurrencia numerosísima, que bien puede asegurarse que cada día pasarían de diez mil almas, sin que á pesar de eso las autoridades hayan tenido la necesidad de intervenir en el más insignificante incidente, gracias á las acertadas medidas […] de la guardia civil del puesto de dicho punto, y muy particularmente también de las autoridades locales […], y muy especialmente el teniente alcalde D. José Paulete, que con su actividad se multiplicaba por cumplir con su deber.
El iniciador de las fiestas, las fundadoras de la capilla y la Comisión de los festejos, bien pueden estar satisfechos […].
El barrio del Puente de Vallecas, por su situación pintoresca, por la baratura de sus comestibles y por sus mil medios de comunicación de tranvías con la villa y corte, es uno de los alrededores mejores y más frecuentados por la gente de buen humor, donde pasan el tiempo muy agradablemente comiendo y bebiendo y gastando muy poco dinero”.

MÁS SOBRE LA VIRGEN DEL CARMEN...

EN LA CALLE DE LA PRESILLA
La linda capilla del barrio de Nueva Numancia —de sencillos tabiques y cinco metros de largo— estuvo, por tanto, bajo la advocación de Nuestra Señora del Carmen desde su inicio y alrededor de ella se celebró la fiesta de la Virgen desde 1880. Y aunque ya sabemos que estaba en la calle de la Presilla, hay que esperar a 1900 para ver dónde se situaba exactamente, lugar que se muestra a continuación en un fragmento del plano de Facundo Cañada (El Plano de Madrid y pueblos colindantes al empezar el s. XX).

Y en 1944 se escribe: “Este local fue la primitiva Capilla donde se dio culto a la Virgen del Carmen en el Puente de Vallecas. Por cierto que aun existe ese local, que conserva las huellas del fin a que estuvo dedicado y que hoy está destinado a frutería en el número 6 [sic] de la (actual) Avenida de José Antonio”.

[El texto citado se recoge en el cuadernillo de la Congregación de la Santísima Virgen del Carmen (1944).]

Y en el mismo lugar se lee:

“Puede decirse que la devoción a la Virgen del Carmen en el Puente de Vallecas es tan antigua como las barriadas mismas, y, aún podría añadirse, que en torno a la primitiva Capilla de la Virgen del Carmen se fue formando este barrio populoso de las afueras de Madrid”.

Cabe así presumir que la Virgen del Carmen sería venerada por los vallecanos en una imagen suya, presidiendo la ermita de la calle de la Presilla, desde muy poco después de existir la barriada.

“La imagen de Nuestra Señora y las andas en que era sacada en procesión el día solemne de su fiesta, fueron regaladas por D.ª Cecilia Vidarte García, con quien colaboraron para allegar todo lo necesario para la instalación de la Capilla D.ª Asunción Poveda y D.ª Martina Bustos, todas ellas vecinas, casi podríamos decir fundadoras, de este núcleo de población. Con singular animación y esplendor se celebraban en aquellos años las fiestas del Carmen, que revestían el carácter de verdadera romería con numerosísima asistencia de madrileños; hasta el punto que se hacía preciso interrumpir la circulación del tren yesero de Vallecas, cuya vía pasaba junto a la Capilla, y era necesario que el predicador de la fiesta hablase al pueblo en pleno campo, desde un púlpito improvisado.
Así hasta 1907, en que se inauguró la iglesia de San Ramón…”.
[Ya en marzo de 1906, durante el Septenario de los Dolores, “en la iglesia de San Ramón (filial de la parroquia de N.ª S.ª de las Angustias, puente de Vallecas), el señor cura párroco” predica el primero de los sermones (La Correspondencia de España, 31-3-1906).]

Aunque antes de 1900 existe una iglesia en la Carretera de Valencia (actual Avda. de la Albufera) y otra ermita en el Barrio de Doña Carlota, la iglesia del barrio era la Ermita del Carmen, según parece desprenderse de una crónica publicada en febrero de 1900, que reproducimos casi en su totalidad por mostrar aspectos de interés del Puente de Vallecas de esa época (Vida alegre y muerte triste. El Liberal, 9-2-1900):

“Y eso, ¿qué es?—preguntaba yo hace pocos días á uno de los más significados vecinos del Puente de Vallecas.
— (…) eso es… la iglesia del barrio.
— ¿La iglesia?... Pues ¡vaya un sitio que han elegido ustedes para la casa del Señor!
— No lo hemos elegido nosotros; la ha puesto aquí quien puede, y con habérsela destinado al culto divino, créame usted, no hay Dios que la traslade á sitio más decoroso y apropiado. Eso sí; no me negará usted que está situada en el punto más alegre del barrio.
— Es verdad. Como que se ha instalado entre una taberna y un café.
— Está cerrada (…). Pero (…) yo se la pintaré a grandes rasgos (…). Es una habitación pequeña: tan pequeña es, que no caben allí más de veinte personas, incluyendo al cura, al sacristán y á los acólitos.
— (…)
— Los funerales y las bodas se celebran en otra parte, en la parroquia de las Angustias de Madrid, á la que pertenece esta barriada.
— Y (…) ¿para qué sirve la tal capilla?
— Pues muy sencillo. Para decir misa y bautizar a nuestros chicos (…). El que quiere oír misa (…) se levanta a eso de las ocho de la mañana y se da un paseíto hasta la iglesia… Que puede entrar, entra. Que ya no hay sitio, pues entonces toma el tranvía de Madrid, y suponiendo que no hayan dado todavía las nueve, tiene tiempo aún para llegar á misa de dos en el Buen Suceso.
(…) Lo peor es lo que sucede respecto á los entierros. Aquí hay un cementerio… en proyecto, gracias al donativo de dos fanegas hecho por D. Eduardo García Goyena (…). Ya comprenderá usted que la ceremonia de enterrar á nuestros muertos no puede quedarse en proyecto como el camposanto (…). El problema se resuelve utilizando el cementerio de Vallecas, situado á cinco kilómetros de la casa mortuoria más próxima al referido pueblo. — ¡Cuánta molestia para la familia y amigos de los pobres muertos!
— Mucho más tienen que sufrir los amigos y la familia de los muertos pobres… Los que algún día serán clasificados como tales, constituyen hoy el ochenta por ciento del vecindario.
(…) La conducción para los sepelios de esas pobres gentes se hace hoy, ¡asómbrese usted!, EN VOLQUETE, ni más ni menos que si se tratara de llevar reses al quemadero…
— ¿Sabe usted que la muerte es aquí más triste aún que de ordinario?
— Sí, señor; pero, en cambio, ya sabe usted que nacemos á la vida católica entre una taberna y un café…”.

A MODO DE RESUMEN
Con la documentación precedente, puede decirse que la existencia del primer lugar de culto en el Puente de Vallecas fue iniciativa de D. Francisco de la Presilla —y su esposa Dña. Antonia Calás, según cabe suponer—, que donó el terreno para la construcción de una capilla dedicada a Nuestra Señora del Carmen, “donde los fieles podrán cumplir con los preceptos religiosos”. Dos años después fallece Francisco de la Presilla, y su esposa seis años más tarde. El terreno lo hereda su hija Josefina. Ella y su marido, Pedro Bosch, hicieron “la obra a su cuenta” y la proveyeron "de cosas necesarias para la celebración de la Santa Misa”, aunque será Doña Cecilia Vidarte quien regale “la imagen de Nuestra Señora y las andas en que era sacada en procesión el día solemne de su fiesta” y colaboren con ella doña Asunción Poveda y doña Martina Bustos para “allegar todo lo necesario para la instalación de la Capilla”. En 1886 “se estrenará en el oficio de la misa un magnífico encaje de mucho mérito, regalo de doña Carmen Romero de Maeso y hecho por la misma señora” (La Correspondencia de España, 15-7-1886).
Ese mismo año quien aparece como propietaria de la capilla es Josefina y, seis años más tarde, se dice que fue fundada “y es propiedad, de doña Josefina de la Presilla y su hija María Bosch”, hija y nieta mayor, respectivamente, de Francisco de la Presilla y Antonia Calás.

Por esa época, la población de Vallecas experimenta notables incrementos: pasa de 2.478 habitantes en 1857 hasta 10.128 en 1900 (Fuente: I.N.E.). Esta progresión siguió in crescendo, puesto que según datos oficiales en 1910 su población sería ya de 19.073 habitantes.

[El barrio del Puente de Vallecas era considerado como una “primitiva colonia de viviendas de obreros y empleados del ferrocarril”.]

El crecimiento se produce, sobre todo, en el Puente, mientras la población del pueblo de Vallecas se mantiene estable. La ermita del Carmen ya no puede atender las necesidades de barriada tan populosa…

Todo hace suponer que la ermita dejó de existir como tal en 1907, cuando se acabó de construir la iglesia de San Ramón Nonato y se traslada al templo la imagen de N.ª S.ª del Carmen. Lo que no sabemos a ciencia cierta es si existió otra ermita posterior dedicada a la Virgen del Carmen en la Avda. de Alfonso XIII (actual Avda. de la Albufera), aunque eso parece deducirse de la Guía descriptiva de Vallecas de 1929, de Federico Iglesia Traverso, en cuyo directorio se incluyen tres ermitas, una de ellas la de Ntra. Sra. del Carmen, siendo las otras dos la Ermita del Corazón de María, en el Barrio de Entrevías, y la Ermita del Dulce Nombre de María, en la Plaza de Doña Carlota:

OTROS LUGARES DE CULTO
El segundo lugar sagrado del que tenemos noticia es la iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, en la Ctra. de Valencia. En el plano de Facundo Cañadas (1900) figura esta iglesia —exenta, sin alguna escuela o dependencia aneja—, construida en 1893 por la Asociación Católica de Señoras de Madrid (fundada en 1869), que tenía escuelas para contrarrestar el avance de las escuelas protestantes.

[A pesar de su existencia, ya en 1900, en la crónica citada de El Liberal (Vida alegre y muerte triste, 9-2-1900) no se alude a esta iglesia como un lugar donde poder cumplir el precepto dominical.
Años después se reedificó con otro estilo convirtiéndose en Capilla y Colegio de niñas del Ave María, siendo inaugurado en 1928 y situado en el nº 76 de la Avenida de la Albufera. Hoy no existe. El actual colegio del Ave María está en la calle Doctor Salgado.]

Y en 1896 ya existe la ermita del Dulce Nombre de María, situada en el barrio de Doña Carlota y fundada por Eduardo García-Goyena, esposo de Dña. Carlota Megía, fallecida en 1885. Don Eduardo falleció seis años después, en 1901.

[En enero de 1896 se nombra “capellán cumplidor de la capellanía fundada por D. Eduardo García Goyena en el barrio de Doña Carlota (Pacífico) a Antonio Febrero” (Unión Católica, 14-1-1896).]

Tres años antes, en 1893, se había publicado la noticia de la construcción “en breve” de “una iglesia en el inmediato barrio de Doña Carlota”, “debido a la generosa cooperación de la Asociación Católica de señoras de Madrid, de la que es presidenta la excelentísima señora condesa de Superunda”:

“Los vecinos todos se muestran muy complacidos por la próxima realización de una de las mejoras que más se hacían sentir, y que ha de proporcionar grandes beneficios a las personas y a la causa de la religión” (El Liberal, 1-6-1893).

La primera piedra de la iglesia se coloca en junio del año siguiente, 1894, y al acto asisten la Infanta Isabel, segunda hija de la reina Isabel II, y el obispo de Madrid-Alcalá, José María Justo Cos y Macho:

“El miércoles de la semana próxima se verificará en el barrio de doña Carlota, de Vallecas, la ceremonia de colocar la primera piedra para la construcción de la iglesia en dicho barrio. Asistirán al acto la Infanta Isabel y el Obispo de Madrid-Alcalá. Con tal motivo habrá en aquel barrio grandes fiestas, entre otras fuegos artificiales” (La Iberia, 24-6-1894).

Y en una crónica de 1906, se dice que “En el barrio de Doña Carlota hay todo aquello que es privativo de la iniciativa particular: una iglesia construida á expensas de la fundación, escuela de párvulos, establecimientos de todas clases (…)” (ABC, 4-8-1906).

El Dulce Nombre de María en una imagen de 1928.

A la derecha, balcones del palacete de Dña. Carlota y D. Eduardo.

FOTO: Alfonso

A los tres lugares de culto hasta ahora citados, en los primeros años de siglo se añade, con carácter privado, la capilla del colegio Niño Jesús de Praga, de los Hermanos de la Doctrina Cristiana, y otra probable: la modesta capilla que tendría el colegio de Ntra. Sra. del Carmen y Sta. Teresa.
Las escuelas de la Doctrina Cristiana se fundan en 1906 y en 1910 tienen 120 alumnos, según se recoge en una noticia publicada en la prensa. El colegio Niño Jesús de Praga estaba situado en la Ctra. de Valencia y llega a albergar a más de 300 alumnos en los años 30.

[En 1933 se afirma que “los hermanos de la Doctrina Cristiana del Puente de Vallecas” se habían dedicado “durante veintisiete años (…) a la enseñanza gratuita de los hijos de obreros de aquella populosa barriada” (ABC, 6-9-1933); “… fundadas (…) por el prelado de Madrid, con la entusiasta cooperación del cura de la localidad (…) y con el (…) apoyo de (una) muy acaudalada propietaria de la población (…). Los 120 niños que en dichas escuelas reciben educación gratuita, bajo la dirección de los Hermanos de la Doctrina Cristiana (…)” (La Correspondencia de España, 20-4-1910).]

Las religiosas franciscanas abren una escuela en Melquíades Biencinto poco después de 1904 con el nombre de “Nuestra Señora del Carmen y Santa Teresa” —posteriormente “Divina Pastora”— que, tras algunos traslados y diversos avatares, no encuentra acomodo definitivo hasta 1931 en la calle de Emilio Ortuño, donde se levanta un edificio que alberga el convento de las religiosas y un colegio para 500 niñas.

[Las Franciscanas Misioneras de la Madre del Divino Pastor llegan a Vallecas sobre 1904 para ocuparse de la educación de las niñas que deambulan por el lugar, sin nadie que las atienda. Al poco tiempo se trasladan a María Bosch y después a unos antiguos saladeros de jamones, hasta adquirir un terreno edificable en Emilio Ortuño. Era el año 1911 (Colegio Divina Pastora, Puente de Vallecas).]

Como ya se ha dicho más arriba, en 1928 se inauguró la Capilla y Colegio de niñas del Ave María, situados en el nº 76 de la Avenida de la Albufera: “El día 11 de abril de 1928 se abre en la Carretera de Valencia nº 66 una casa para las Avemarianas, la primera que tienen en Madrid las Operarias del Divino Maestro. Albergó la primera comunidad Avemariana y escuela de El Ave María. El edificio, de estilo gótico, con una elegante fachada, contaba en su recinto con cinco clases amplias y grandes ventanales en el primer piso. La planta baja estaba ocupada por hermosas galerías, obradores, salón de actos y capilla. El segundo piso era el destinado a vivienda de la Comunidad, que incluía también una capilla, para uso de las Avemarianas. En el año 1968 se decide cerrar el Colegio por tenerlo en venta y no contar con los medios económicos para reparar lo deteriorado del edificio y se traslada al complejo parroquial de Nuestra Señora de la Peña, del que forma parte en la actualidad.” (madrid.avemarianas.org/historia). Correo electrónico: jlghpv15@gmail.com